Supersticiones: ¿Por qué da mala suerte tirar la sal?

Derramar la sal está considerado un mal augurio desde tiempos remotos. Ya en la antiguedad, este compuesto de sodio se consideraba un elemento que protegía frente al maleficio y que puedía comportar buena suerte. Tirar la sal en la mesa se traducía en tener mala suerte y pérdida de riqueza.

¿Pero de dónde viene esta superstición? Las propiedades positivas que se le atribuyen a la sal pueden estar relacionada con el la facultad de este elemento de conservar alimentos. Tal es la buena fama de la que goza la sal, que incluso se creía que en una casa en la que hubiera sal también había dinero. De hecho, se echaba sal en los rincones de las cuadras porque se creía que así se evitaban las enfermedades del ganado.

Además, también se usa la sal en rituales. Para protegerse del diablo, nuestros antepasados dibujaban un círculo de sal alrededor suyo, formando el llamado «círculo mágico». Para contrarrestrar el mal de ojo, de igual modo, se bañaban en agua con sal los pies y las manos o se bebía agua salada. Y un plato de sal debajo de la cama, absorve la enfermedad del enfermo.

Éstas y otras supersticiones relacionadas con la sal pueden encontrar su origen en una explicación religiosa. La sal simboliza la alianza del hombre con la divinidad, y así lo recoge la Biblia incluso. Del mismo modo, se dice que tirar la sal da mala suerte porque tal torpeza fue cometida por Cristo durante la Última Cena. Para evitar el maleficio de haber derramado la sal, sin embargo, basta con tirar una poca sobre el hombro izquierdo.

Resulta extraño que un producto tan común y utilizado como es la sal haya estado considerado ahora y en el pasao un producto de la naturaleza tan mágico.

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