Botticelli, inspirándose en la historia de Nastagio fielmente tomada de la octava novella de la quinta jornada del Decamerón de Boccaccio, «El infierno de los amantes crueles», realizó cuatro maderas pintadas al oleo que llamó «El Nastagio degli Onesti» (1483).
Encargado como regalo de boda para una pareja florentina.Un regalo que causa asombro, miedo, perplejidad e ira, al menos a mi. Sin embargo a los ojos de Anamaría Hurtado, psicoterapeuta, en Venezuela aparecen componentes psicológicos
Botticelli hace uso de un recurso narrativo, en esta pintura, utilizado en el gótico. La repetición de las figuras en distintos tiempos, a modo de comic, como si de imágenes simultáneas se tratara. Sin embargo el periodo es el Quattrocento donde ya había sido superado. Tratándose de Botticelli, Anamaría se inclina a interpretar este “primitivismo” como metáfora de significados velados y a la vez de-velados.
Primera escena. El encuentro con los fantasmas
En la primera madera, aparece el joven Nastagio, quien fue rechazado por Paola Traversari, una joven doncella de Rávena. Se encuentra triste y buscando la soledad, abandona a sus amigos para adentrarse en el bosque. Interpreta Anamaría «que el bosque representa esta introspección del joven Nastagio». Tres escenas en el lienzo. En el plano más lejano se ve al joven hablando con sus amigos, luego en primer plano un Nastagio cabizbajo, caminando meditabundo, adentrándose en el pinar. El tercer escena, ante sus ojos aparece una bella doncella que corre desnuda. Huye despavorida de un despiadado jinete y su jauría. Los dos mastines, en su oposición negro-blanco, la alcanzan y muerden, con sus fauces, la blanca carne de la joven. En este primer momento, Nastagio piensa en intervenir para salvarla y coge una vara.
Es tremendamente fuerte el contraste en esta escena entre la serenidad del paisaje, ovejas que pastan, la claridad del cielo, el tranquilo mar,la reunión alegre de amigos con la terrorífica cacería a una desvalida (desnuda) mujer en mitad de un bosque (lugar de lobos, ataques de poscritos, etc) perseguida por un caballero (imagen prototipo de protector de mujeres y desvalidos). «Esta intensa oposición hace de esta escena un clásico del horror. » Según lo ve Anamaría, y cualquiera de nosotros.
Esta obra,»El Nastagio degli Onesti», consta de cuatro pinturas donde se narra la historia de este personaje. Pero el resto será otro día.
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muri, un beso