El disco trilobulado de Sakkara ¿un oopar?

Museo Egipcio de El Cairo existe una pieza que se halla en una vitrina solitaria, nadie se extraña al verla, se trata de la rueda o disco del príncipe Sabu, al que se conoce como el disco trilobulado de Sakkara y sin embargo, aún no se conoce su utilidad.

Su descubrimiento, año 1936 en la región de Sakkara, Templo de Zóser. Brian Walter Emery  dirigía una excavación arqueológica cuando dio con la tumba del Príncipe Sabu (nº 3111), llena de  utensilios. El Príncipe Sabu, perteneció a la I Dinastía que reinó en Egipto  sobre el 3000 A.C. Uno objeto,en concreto, le llamó la atención, era circular, de 61 centímetros de diámetro y 10.6 centímetros de altura en la zona central, fabricado con suma delicadeza en  piedra de esquisto. Para trabajar esta roca es necesario  un minucioso tallado dada su fragilidad.

Walter Emery comentó al respecto de este extraño hallazgo “…no se ha conseguido ninguna explicación satisfactoria sobre el curioso diseño de este objeto”.

Enn la mayoría de webs o blogs que tratan el tema, el disco se cataloga como ooparts por  su curiosa forma. Otro dato para incluirlo  es que  la rueda llegó a Egipto de la mano de los invasores Hicsos al final del Imperio Medio, en el 1640 a.C. A demás de que el esquisto no es precisamente el material más adecuado para emplearlo como rueda, por su fragilidad y su peso.

Sin embargo, era un material corriente, fabricado dentro de una tecnología perfectamente posible para la época y las habilidosas manos de lo talladores.

Hipótesis

Objetos similares diseñados en la década de 1970:

“Los ingenieros de Lockheed Missile & Space Company diseñaron un objeto muy similar a este disco durante la década de 1.970, utilizable para ahorrar energía en trenes de transporte o almacenar ésta en vehículos a propulsión eléctrica.

Otros ingenieros de la Airesearch Manufacturing Company continuaron estos estudios desarrollando un modelo que debía estar encerrado en el interior de una carcasa llena de lubricante. ”

“El también egiptólogo Cyril Aldred llegó a la conclusión de que, independientemente de lo que fuese aquel objeto, su diseño se correspondía sin duda, a una reproducción de un objeto metálico anterior mucho más antiguo».

Aún hoy sigue siendo uno de los muchos misterios que nos tiene reservados este singular lugar de la Tierra.

muri, un beso.

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