La micología es una ciencia que personalmente desconozco y solo alcanzo a saber que existen setas y hongos que son saludables para el ser humano o venenosos.
Sin embargo pensaba que más o menos la forma era similar en todas, es decir con el sombreo más o menos grande, más o menos extendido. Pero, me he quedado muy sorprendida al comprobar que existen unas setas con formas fálicas.
Una de las razones por las que nuestros antepasados comían ciertos alimentos era por que les recordaban a los distintos órganos del cuerpo humano y pensaban que con su consumo podrían potenciarlos o sanarlos.
Desconozco si este hongo en concreto es o no venenoso, no dan la infromación, pero estoy casi segura, de que al verlo a más de uno se le ocurriría pensar que podría potenciarle el…
Sólo mide cinco centímetros, crece sobre la madera y tiene forma de falo. Se trata de un nuevo hongo, descubierto en el 2009, para el cual no ha sido difícil buscar un nombre: ‘Phallus drewesii’, o el falo descubierto por Robert Drewes, de la Academia de Ciencias de California. Fue hallado en la isla africana de Santo Tomé y ha sido descrito por Dennis Desjardin y Brian Perry, de la Universidad Estatal de San Francisco, en la revista Mycologia.
Las setas con forma de falo no son tan infrecuentes en la naturaleza, y de hecho constituyen una familia, la ‘Phallaceae’, y un orden, ‘Phallales’. En concreto, existen otras 28 especies de hongos ‘fálicos’ en el mundo, si bien esta última especie es particularmente pequeña y destaca por su colores atípicos y por su inclinación hacia abajo y no hacia arriba, como suele ser común.
«La seta surge de un huevo y se elonga durante cuatro horas», dice Desjardin. «Su olor atrae a las moscas, las cuales consumen sus esporas y las dispersan por todo el bosque».
Bueno, ¿quieres verlo? Pues ahí va. Muy pornográfica la naturaleza.